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Gerencia y parte de la familia de Hijos de Antonio Ferre S.A. en la actualidad.
El Teatro Principal acogerá, el próximo 9 de noviembre, la III Gala de Empresas Centenarias de la provincia de Alicante. Un evento organizado por la Cámara de Alicante y la Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (AEFA) -con el patrocinio de Cajamar y la Diputación de Alicante-, que tiene como objetivo homenajear a las empresas más longevas de nuestra zona e invitarlas a pertenecer al Club de Empresas Centenarias de la provincia.
Esta edición reconocerá la trayectoria de siete compañías que acumulan más de un siglo de vida a sus espaldas: Hijos de Antonio Ferre S.A., es una de ellas. Se trata de una empresa familiar ubicada en el pequeño municipio Banyeres de Mariola que se dedica a la fabricación de tejidos naturales y sostenibles -aunque sus orígenes están ligados a un almacén de abonos-, y que hoy en día cuenta con más de 30.000 metros cuadrados de instalaciones y un grupo con 140 empleados.
Directivos y trabajadores de la empresa el día de la celebración del centenario de la compañía.
Desde 1914 hasta la actualidad la empresa se ha enfrentado a numerosos retos, consiguiendo el reconocimiento internacional por ser un referente en sostenibilidad y pionera a nivel mundial en el proceso del reciclaje textil.
La empresa Hijos de Antonio Ferre S.A. fue fundada hace 108 años por Antonio Ferre Ferre; en aquel entonces, como un almacén de abonos que iban envasados en sacos de yute.
Sin embargo, en aquellos tiempos (1914) y en un pequeño pueblo como Banyeres de Mariola, poca era la afluencia de clientes para comprar – más aun teniendo en cuenta que dicho almacén se encontraba a las afueras de la localidad-. Es por eso que, para aprovechar el tiempo, el fundador decidió comprar un telar manual de segunda mano: así, la persona a cargo del almacén podría ir fabricando tejido de yute para los sacos que contenían los abonos mientras no hubiera faena.
La primera nave industrial de comienzos del siglo XX. NAPS2
Pronto se dieron cuenta de que se fabricaba más tejido del necesario para el uso propio, por lo que se empezó a vender el excedente a clientes de la localidad que le daban usos varios como sacos, tejidos para la recolección de olivas, etc. Y poco a poco, se hizo más rentable el negocio de la venta de tejido que el de abonos, por lo que se fueron comprando más telares para dedicarse, exclusivamente, a la venta de tejido de yute, lino y cáñamo para usos industriales: sacos, embalajes... Con el tiempo se fue ampliando el parque de telares y fue necesario construir una segunda, y después una tercera, nave adyacente a la original.
En el año 1947, y ya con la segunda generación al cargo de la empresa -compuesta por los hijos del fundador-, inicia su andadura Hilaturas Ferre S.A., empresa destinada a la fabricación de hilos que, en un principio, servía para suministrar a la tejeduría pero que poco a poco se convirtió en un negocio propio.
Hijos de Antonio Ferre S.A. cuenta con tres grandes naves en Banyeres de Mariola.
Las dos empresas fueron creciendo, cada una por su lado, y al poco tiempo llegó la tercera generación -Antonio Ferre Miró, dedicado fundamentalmente a la tejeduría y Alfredo Ferre Miró, que se centró principalmente en la hilatura- para hacerse cargo de las mismas. El resto de miembros de la familia continuaron como accionistas, pero sin formar parte de la gestión de las empresas.
Cabe destacar que uno de los hitos más importantes de estas compañías ocurre en los años 80, cuando se produce un cambio de tecnología en la hilatura y se comienza a dar los primeros pasos en el reciclaje textil.
Es a principio de la década de los 90 cuando entran a trabajar los miembros de la cuarta generación, que es la que actualmente está al frente de las empresas: los hijos de Alfredo Ferre, que continúan dedicándose a la hilatura, y los de Antonio Ferre, en la tejeduría. «Desde entonces y hasta hoy, formamos un grupo industrial bajo el paraguas de la empresa Ferre Agrupación S.L., contando con algunas instalaciones y servicios comunes y otros propios de cada sociedad, pero siempre unidos por fuertes lazos familiares», tal y como señalan desde la dirección de las compañías.
La primera nave que se creó fue construida en 1993.
Por parte de la empresa Hijos de Antonio Ferre, es Antonio Ferre Molina quien empieza a hacerse cargo de la compañía en su nueva etapa y a liderar un cambio en el mercado tradicional, ya que el tejido de yute fue perdiendo su principal utilidad como tejido industrial y lo poco que se utilizaba procedía, en grandes cantidades, de países asiáticos. Es por eso que se empezó a buscar otros mercados para los productos tradicionales como el lino y el yute.
Uno de los hitos más importantes de estas compañías ocurre en los años 80, cuando se produce un cambio de tecnología en la hilatura.
Durante este periodo se empezó a diseñar, fabricar y comercializar tejidos para el calzado y la marroquinería y se realizó un cambio de instalaciones y de maquinaria importante.
A mediados de los 90 -cuando el mercado del calzado empezó a estar «maduro»- la firma entró de lleno al sector del textil hogar y la decoración, especializándose en tejidos naturales principalmente de lino, yute y algodón. En esta época, también, la familia comienza a asistir a las primeras ferias del sector y a abrirse al mercado internacional.
Poco a poco, y con el paso de los años, Ferre Agrupación S.L. ha ido ampliando sus instalaciones y los productos que comercializa, pero enfocándose en tejidos naturales y sostenibles, siendo reconocidos a nivel mundial como especialistas en este campo.
A mediados de los 90, la firma entró en sector de la decoración y el textil hogar, especializándose en tejidos naturales.
De hecho, es desde principios del año 2000 cuando la empresa Hilaturas Ferre empieza a poner en valor el proceso de fabricación de hilos reciclados y sostenibles, «algo que veníamos haciendo desde hacía mucho tiempo pero que no se decía abiertamente porque existía una percepción de baja calidad entre el público», afirman desde la compañía. Sin embargo, ya en 2006 se decide crear la marca «Recover» para poner en valor este proceso sostenible.
A partir de ahí, la tejeduría Hijos de Antonio Ferre comienza a trabajar con este material, siendo desde entonces, y hasta hoy, pioneros y especialistas en la fabricación de tejidos fabricados con hilos reciclados, tanto para textil hogar como para calzado, marroquinería y otros usos industriales.
Anuncio publicitario de Antonio Ferre en los años 20-30.
En el año 2014, Hijos de Antonio Ferre celebró su centenario reuniendo a todos los trabajadores y familiares. Actualmente, la empresa continúa ampliando sus instalaciones y maquinaria con grandes inversiones que les permiten ser más competitiva a nivel mundial y poder hacer frente a los nuevos retos de la globalización, como la fabricación masiva en países con escasas condiciones laborales y de calidad.
De este modo, tanto la compañía Hijos de Antonio Ferre como Hilaturas Ferre son reconocidas internacionalmente como referentes de la sostenibilidad, siendo pioneras a nivel mundial en el proceso del reciclaje textil. La empresa Hilaturas Ferre, además, ha sido reconocida en numerosas ocasiones con premios y reconocimientos por su proceso sostenible.
Trabajadores de la empresa en los años 60.
Cabe destacar que recientemente se ha creado la empresa «Recover Textile Systems», como proyecto de escalabilidad reforzado con capital externo, para fabricar fibra reciclada. Asimismo, se han ido poniendo en funcionamiento fábricas para el reciclaje de fibra textil en varios países del mundo, permaneciendo la gestión operativa principal en las instalaciones de Banyeres de Mariola.
Dirección: Carrer les Molines, 2, 03450 Banyeres de Mariola, Valencia
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